Mi novela o el euro.

No sabía si reír o llorar cuando ayer, sin ir más lejos, recibí de otra editorial más, en lo que va de año,  la carta  de rechazo numero 103 de una mis novelas. Una editorial pequeña pero elegante. Al menos así ha sido su contestación a mi propuesta. Me han dicho sinceramente que no pueden con “tanta novela” por falta de presupuesto. Que les viene grande, y que, en consecuencia que me dirija a una de las editoriales importantes de este país, o mejor si es extranjera, porque valer lo vale.
Por supuesto que no voy a hacerles ningún caso, porque yo me dirijo a quien me sale. ¡Bueno soy yo! Casi he estado a punto de contestarles que podía conseguirles, con el aval de todos mis bienes, pasados, presentes y futuros, un crédito del banco. Pero, no sería verdad, y me he contenido. Es el banco el que no tiene un euro que prestar por nuestra mala cabeza, según dicen la Merkel y los mercados.
Cuando he hablado del asunto con el director del banco, incluso llevándole copia de mi novela, me ha dicho que, quizás, con la amnistía fiscal la cosa vaya arreglándose.
<<Entonces, ¿qué me recomienda?>> me he atrevido a preguntarle, —mal hecho por mi parte, porque los bancos, gratis, ni respirar delante de ellos—. Sin embargo, el señor, muy amable, me ha aconsejado que, con cada carta  nueva que mande con una propuesta de edición de mi novela a cualquier editorial, ya sea pequeña, grande, famosa o desconocida por su padre, le mande copia al Ministro Montoro, con el ruego de que la haga pública a los tenedores de los activos ocultos, que son los que, amnistiados, van a reactivar la economía; por otra parte, no habiendo que pagar a los trabajadores, cosa que por fin han entendido los sindicatos, fluirá el crédito y  se podrá publicar mi novela, porque buena lo es. No será por defecto de calidad literaria. Pero, es que a mayor abundamiento, creará empleo. Palabra de Director de Banco.
Miedo me da su consejo, primero por su carácter de Agente literario, y segundo porque me lo cobrará bien cobrado. Seguro. Además, lo mismo Montoro pretende cobrar el IVA por adelantado.
Sin embargo, una cosa tengo muy clara. O se publica mi novela o el euro se nos va patas abajo.

2 comentarios:

  1. Ya entiendo el porqué se nos va el euro por el inodoro... porque no se ha publicado esa novela.

    Desde el inodoro, por el que también se van mis ilusiones literarias, te dejo un saludo (en tal espacio y estado, prefiero no dejar besos. Sería algo muy desagradable)

    Ah... ¡gracias por la sonrisa!, me hará compañía en mi destierro por la alcantarilla.

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  2. Ya ves lo que he tardado en llegar hasta tu publicación, es cierto que estamos ahora, un martes y trece de noviembre, vípera de una huelga general, todavía peor que en el mes de abril.
    Duele, duele bastante que se nieguen publicar lo que haces, lo he pasado y tiré una imaginaria toalla sobre el sudado ring de las editoriales, ganaron ellas, algunas, por cierto las más grandes del país, con estilo y buenas fintas, otras, quizás más henchidas de ínfulas por estar a la defensiva dado su poco tamaño, con los golpes bajos que has de curar con tiempo.
    Bueno, amigo, tú ya tienes el libro en muchísimos sitios, en mi casa, por ejemplo, firmado y dedicado, ocupando un lugar de honor.
    Bien, ahora voy a ver el artículo que has escrito recientemente y he visto en Fb; muy bien el Plinio del avatar...
    Saludos.

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