La herejía como emancipación.



 En su novela «Herejes», el escritor cubano Leonardo Padura nos presenta una fascinante historia de una familia judía que ha sido afectada por la tragedia, la religión y la revolución. El autor cuenta la historia de un hombre que es desterrado de La Habana por razones políticas y que, más tarde, encuentra a su familia que ha sido separada por los estragos de la Guerra Mundial.

 

En casi seiscientas páginas, Padura explora el conflicto entre la ortodoxia religiosa y la herejía en la historia de la familia de la novela, centrándose en la figura de un rabino que, a pesar de recibir una severa educación religiosa, decide hacer su propia interpretación de la Torá. Esta postura lo enfrenta a la ortodoxia religiosa, lo que lleva a su destierro y a su familia a ser víctima de la intolerancia religiosa.

 

La narración de Padura, a través del detective y expolicía Mario Conde, nos permite adentrarnos en la mente de sus personajes, mostrándonos sus anhelos, esperanzas y preocupaciones. El autor nos presenta una versión interesante de la herejía, donde la liberación personal es primordial frente a la rigidez de la doctrina religiosa.

 

«Herejes» es también un análisis de la vida en Cuba después de la Revolución. Padura, quien creció en Cuba en la década de 1960, aprovecha la oportunidad para explorar la doble vida que muchos cubanos tuvieron que vivir. En su novela, vemos cómo los personajes luchan para mantenerse fieles a su religión y a su propia cultura, en un país que busca apagarlas en nombre de la revolución.

 

Lo más interesante de esta obra es cómo Padura nos muestra que la herejía no es sólo una ruptura con la doctrina religiosa, sino también una forma de sobrevivir en un mundo donde la búsqueda de la libertad y la emancipación individual son necesarias para la supervivencia. A través de su obra, Padura nos recuerda la importancia de la libertad y la flexibilidad en nuestra vida, y cómo seguir nuestros propios caminos puede ser la mejor forma de encontrar la verdad, a costa de pagar un alto precio. 


La primera parte, la que insiste en la parte histórica, es la que tiene mejor lectura, a pesar de ciertas reiteraciones que, por momentos, la hace tediosa. La parte que narra la historia de los "emos" puede parecer algo descosida, y finalmente resuelve con excesiva casualidad. No obstante ello, es una excelente novela, muy bien documentada que merece ser leída pausadamente para su disfrute.


jcll. abril 2023.